El 2020 es el año de las billeteras virtuales en Latinoamérica. Considerándolas como la respuesta a la sub-bancarización de la población, son cada vez más las entidades que apuestan a desarrollar una propia: bancos públicos y privados, fintechs y retailers.
La pandemia ocasionada por el COVID19 potenció la adopción de medios de pagos digitales, posicionando a las eWallets como una de las principales herramientas para reducir la circulación de dinero en efectivo. La aceleración es notable, al punto que algunos países, entre los que se destacan Brasil y Argentina, auguran un crecimiento de más del 100% en la cantidad de usuarios. En estos casos, además, destacan por la cooperación entre las entidades y los gobiernos.
Las empresas que constituyen sus billeteras afrontan un doble desafío: primero, hacer frente a la pandemia y maximizar la apertura de cuentas; después, prosperar más allá de la coyuntura actual. En ambas instancias, la apuesta tecnológica se transforma en un factor fundamental. ¿Cuáles son las claves IT para montar una eWallet?
Onboarding & UX

Si bien existen plataformas que operan a través de mensajes de texto, en la mayor parte de los casos las aplicaciones móviles son el canal digital elegido. Frente a un público que muchas veces no está bancarizado ni acostumbrado a operar por home banking, una buena experiencia de usuario es un requisito para garantizar la funcionalidad. Las apps deben ser, ante todo, fáciles de utilizar.
Pero, además, deben prestar especial atención a la inmediatez de los procesos. Es importante que, desde el primer momento, los nuevos clientes comprendan los pasos a seguir y reciban respuestas rápidas. Un onboarding ágil y paperless no sólo expande la posibilidad de ofrecer el servicio en términos geográficos, sino que permite reducir los abandonos en el marco de la creación de nuevas cuentas. La validación de datos con entes gubernamentales y las certificaciones de seguridad, completan el listado de requisitos.
Back Office en tiempo real
Los canales digitales son sólo el comienzo. Con cuentas gratuitas y comisiones bajas, el negocio de las ewallets se centra en gestionar un gran volumen transaccional y en ofrecer otros productos a sus usuarios: tarjetas de crédito virtuales o prepagas, préstamos, entre otros. Por ello, un buen front end debe integrarse a una plataforma de back office robusta y ágil.
La capacidad de procesar numerosas transacciones, impactando cada operación en tiempo real, determina no sólo la experiencia del usuario (que espera ver su saldo actualizado instantáneamente) sino también la posibilidad de escalar.
Además, la centralización de datos facilita su análisis, permitiendo a cada entidad conocer mejor a sus clientes para poner a disposición nuevos productos según sus hábitos de consumo.
APIs
Las Application Programming Interfaces llegaron para revolucionar la industria financiera. La apertura de información, que durante mucho tiempo se mantuvo como “propiedad” de bancos u otras entidades, es el ingrediente principal de un ecosistema que apuesta por la colaboración y la integración.

En el caso de las eWallet, la incorporación de APIs presenta dos grandes beneficios. Por un lado, facilita la obtención de información, disminuyendo el tiempo y los costos. A la hora de crear una nueva cuenta, por ejemplo, la billetera virtual puede acceder rápidamente a datos confiables sobre su potencial cliente, validar su identidad y chequear su historial crediticio.
En segundo lugar, las APIs promueven la integración de empresas para generar nuevos modelos de negocios. En este sentido, cabe destacar la reciente colaboración entre la conocida billetera MercadoPago y organizaciones de envío de remesas para permitir que los usuarios transfieran dinero de un país al otro sin la necesidad de tener contacto con el efectivo.
Códigos QR
El uso de códigos QR es la funcionalidad estrella de las billeteras virtuales. Son cada vez más los comercios que los utilizan. Y, aunque la pandemia haya puesto un freno a la circulación de las personas y a sus visitas a locales, serán sumamente útiles al reducir la circulación de efectivo cuando se retomen las actividades. La agilidad de las transacciones y la interoperabilidad lo convierten en un elemento esencial.
Reporting & Compliance
A medida que se avanza en materia de regulación, tanto bancos como fintechs deben adaptarse a los requerimientos de compliance actuales. Las plataformas IT no deben limitarse a la operación. Por el contrario, aquellas que integren el transaccional de cada organización a su contabilidad y automaticen el reporting frente a entes regulatorios, no sólo ahorrarán tiempo y dinero, sino que disminuirán riesgos y contarán con información actualizada para guiar sus decisiones.